viernes, 14 de septiembre de 2007

Deprisa, deprisa

Tengo un déficit literario que me debería dar vergüenza reconocer, pero el cual no impide hablar de obras que me hayan impactado. Hoy se me ha venido a la cabeza un relato corto que leí hace años: La autopista hacia el sur, de Julio Cortázar. Al leerlo, además de cambiar nuestro concepto sobre un atasco, es inevitable pararse a pensar en cómo vivimos, la calidad de nuestro tiempo, nuestras preferencias y la adaptación a las circunstancias. La historia narra un atasco en la autopista de París a Marsella en el que miles de coches se paran durante semanas, con lo que forman una pequeña sociedad en la que las relaciones van surgiendo y consolidándose hasta que de repente acaban sin previo aviso. Más que hablar de La autopista hacia el sur, lo ideal es volverlo a leer. Una buena excusa para consumirle media hora de tiempo al fin de semana que llega. Hasta el lunes.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Veo que no tienes muchas pausas... y que en tu carretera personal tienes pocos atascos.
Me alegra de que todo te vaya muy bien... por cierto, me ha gustado mucho esta idea que has tenido, ya que así podré ir leyendo a menudo a un gran periodista!!! Es una buena oportunidad para los que nos gusta saber de ti.

Avísame cuando salgas en tu nueva aventura profesional, tengo muchas ganas de ver cómo te desenvuelves de reportero!

Espero poder verte pronto, al igual que a tu familia. Y también tienes pendiente una visita por Málaga; no tardes mucho en dejarte caer por aquí.

Besos para ti y la familia...
Tu primo Alberto

Luis dijo...

Muchas gracias primo.
Esa visita te la debo y la pagaré pronto. Te tendré informado de mis movimientos
Un abrazo y espero que sigas leyendo el blog, a mí escribirlo me ayuda mucho. Ciao!