lunes, 25 de agosto de 2008

El Parque

A un minuto de casa y hacía años que no lo pisaba. Han sido 30 minutos de carrera, en los que he visto a Jorge con su moco, a la madre de Pachón llamándolo para merendar, a mi Etrusco Único rodando. He vuelto a jugar al conejo de la suerte, a hacerme el gracioso para que las niñas me vieran como un líder, a comerme un bollycao. En media hora he pasado cientos de tardes, me he subido a la estatua de la paloma, he jugado a piedra, papel o tijera y me he saltado la valla del colegio para jugar un 7 contra 7, o 9 contra 9, o cualquiera sabe cuántos éramos. También he ganado una reina y un campo a campo, aunque Ramón discrepa. En este rato he vuelto a la edad del pavo, a reírme de tonterías, a quitarle la novia a Ramón, que se ha ido todos los fines de semana a San Fernando. Le he pedido salir a tres o cuatro y me he ido a casa fastidiado porque el nuevo se llevaba todas las sonrisas. He ido un momento por la radio para escuchar el Sevilla y he hecho ruido para joder al padre del Antonio Manuel. Nos hemos acercado al encaramao para escuchar sus historias, he imitado voces y me he picado, como cada tarde, con el Pachón. Ha pasado media hora y he visto Campeones, Los Simpsons, El Día Después y me he grabado una cinta de Emilio Aragón en casa de Jorge. Hemos hablado de la nueva de Lenguaje y hemos pensado en celebrar el cumpleaños de Álvaro haciéndole una fiesta sorpresa en casa de Irene. Grey, María Jesús, Irene, María y África se han puesto a cantar y los niños nos hemos avergonzado. La comba nunca podrá con la pelota. Ellas son las imbéciles. ¿Verdad Pachón? Baja la voz. Son guapas. Y nuestras amigas. Y tienen ideas que nos da vergüenza reconocer que nos apetecen. Qué duro iniciarse en este mundo de apariencias adultas y de roles por asumir. Pero qué bonito. He terminado de correr. He dado la espalda al parque y allí he dejado esos fotogramas de la película de mi infancia y preadolescencia. Me he sentido bien. Me he acordado de todos. No ha pasado tanto tiempo: ¿15 años?, ¿13? ¿media vida? Un rato. Qué maravilla retener esos años privilegiados con sólo dar unas vueltas al parque. Me voy a dormir que mañana toca colegio...

11 comentarios:

Sonia dijo...

joe, me ha encantao....has hecho q recuerde a tela de gente q hace años no pensaba en ella, menos mal q no decidiste cerrar el blog! gracias por entretenerme en los vacios ugetistas. saludos!

Nebulus dijo...

Bienvenido a la edad madura Sr. Márquez. Recuerda que la nebulaka tenía 24 años y 10 meses cuando nos vimos las caras por primera vez... Ya te voy advirtiendo que los 33 años, aparte de la edad de Cristo, es más de lo mismo, pero más calvete y con alguna que otra cana que puede hacerle creer a alguna incauta que uno sabe algo de qué va la vida pero es mentira...
Bueno parafraseando a tu estilo primero comenzaremos la frase con un adverbio absoluto y rotundo para matizar después, a las tres o cuatro palabras la frase y dejar la frase abierta y presa del relativismo...
Es totalmente falso, vamos puede ser...
O como titularon esos gamberros ingleses que te gustan tanto: "Definitely, Maybe"

Anónimo dijo...

Pues a mi, en un minuto, me has traído una sonrisa permanente, un escalofrío feliz y un montón de imagenes de mi infancia entrelazadas con las tuyas.
Gracias mil y un besito.
Begoña.

Pd: Es normal que Priscila te quiera tanto. Eres un sol. ;-)

Anónimo dijo...

Me encanta.
Me encantas.
Eres un crack.

Priscila.

Angela dijo...

Pero esto q es? el texto está bien, pero ya vale de pelotear al Luisma, no? ya veo q me va a seguir tocando a mi poner la voz crítica aqui, no? Luis, la comba siempre fui muy superior al futbol, pues demuestra nuestra capacidad de hacer varias cosas a la vez desde pequeñitas. Ah! los q intentaban hacerse los graciosos todo el tiempo tampoco nos gustaban!! jajaja.bego! bienvenida al mundo bloguero

Anónimo dijo...

Tio, mu fuerte lo tuyo con Emilio Aragón...

David Fornet

Anónimo dijo...

gracias por hacernos recordar auqellos momentos entrañables de nuestra infancia, aunque hoy día los hay con nuestra edad que se siguen comportando igual....
Bienvenido a Sevilla, espero que tu vuelta no sea muy dura.

Besos
Carmela

Anónimo dijo...

A 800 kilometros mi infancia fue igual Luis. Y no sé si os pasa pero esa es de las etapas más bonitas de mi vida: la siguiente en mi caso, y en el de muchos creo, fue más jodida; la dolescencia es un coñazo: grunge de palo, granos, indefinicion,rebeldía cutre, inseguridades, etc.

Anónimo dijo...

Por cierto, creo que o te has olvidado o lo comentaras más tarde, que hoy es el aniversario de la muerte de Puerta: me pilló en tu tierra y fue algo fuerte, la verdad

Angela dijo...

Ah! entonces era eso cuando dijiste "quedan 13 días..." Hoy hace 1 año q tienes blog, no? recuerdo aquel día perfectamente. otro buen motivo para q sigas escribiendo. besos

Anónimo dijo...

se me han saltado las lagrimas,gracias por recordarme ese parque que ahora me queda tan lejos,y en el q di mi primer beso,o me dieron,segun se mire, mil gracias!un abrazo